Ya ha pasado más de un mes desde que te fuiste de mi vida... Y, ¿sabes qué? Ya no te echo de menos. Creo que es mejor así. Tú eres feliz, y yo... Yo estoy haciendo lo que mejor sé hacer: SOBREVIVIR. Sí, sobrevivir a todo. A las criticas, a los fallos, a las malas miradas, a la soledad, al frio intenso, al miedo a perder de nuevo...
Es curioso que antaño fueras mi musa, y ahora que ya no estas, mis letras tienen más sentimiento. No pienso decir que el haberte perdido, haya sido una lección. ¿Por qué habeís cogido esa manía de decir que hacer las cosas mal es aprender? ¿Estáis de broma? Venga, por favor, a nadie le gusta hacer las cosas mal. Solo es, que el haberte perdido, ha sacado en mi sentimientos que no sabía que podía sentir. La verdad, no sé si darte las gracias, o dejar las cosas como hasta ahora.
Aunque realmente, todo esto que estoy poniendo aquí, ya no tiene ningún sentido, ¿verdad? Joder, seguramente ni si quiera leas esto, pero te hablo directamente como si lo estuvieras leyendo... Sí, tú.
¿Lo ves? Otra vez... Será porque en el fondo, aun sé que sigues leyendo todo lo que publico, o al menos, eso creo... Pero bueno, si lees esto, ya sabras que es para ti.
Solo te pido, que guardes cada recuerdo como momentos que ya nunca volverán, porque no hay vuelta atras. Que cuides aquel regalo que te hice hace un año, si es que aun lo tienes... Y que sepas, que todo lo que dije, lo dije muy en serio. No te tomes a broma nada de lo que paso, porque para mi al menos, fue muy especial.
Espero que ahora seas más feliz, ya que te llevaste gran parte de mis ganas de serlo.
Así que, hasta siempre, o hasta nunca... Quién sabe.
